Adiós a la conciliación de colegio y conservatorio

jornada_continuaAdiós, o hasta luego. En la Comunidad Valenciana se ha rechazado la jornada escolar continua. El único «buen parche» que tenían los alumnos que cursan simultáneamente dos planes de estudios, ya que la creación de centros integrados nunca se ha generalizado.

En «¿Son mulas o cívicos alumnos?» comparábamos a los alumnos con trabajadores de una empresa. Y si a alguien le pudiera parecer exagerada esta comparación, la realidad nos demuestra que no es una visión tan peregrina de la realidad. Ya que algunos padres piensan principalmente que el colegio es el lugar que atiende a sus hijos mientras están trabajando. Cuando esto simplemente es un beneficio colateral de la escolarización de los hijos.

Estos años ha estado a debate la jornada continua en mi comunidad, pero parece ser que la proximidad de las elecciones autonómicas y la falta de consenso han provocado el paso atrás en la jornada escolar. A continuación tenemos una serie de entradas sobre la evolución de la jornada escolar continua en la comunidad valenciana publicadas por la web de la Conselleria:

Y después de todas estas buenas noticias del año pasado; dos notas de prensa de este año que indican el retroceso:

A falta de ver los detalles del informe que concluye que la jornada escolar continua es antipedagógica, en un lejano 2008 encontramos en un reportaje de El País todas estas declaraciones respecto de los beneficios o no de la jornada escolar «a la finlandesa»:

Por otra parte, la «preocupación» de que la jornada continua puede estar relacionada con el fracaso escolar o el bajo rendimiento académico -como ha apuntado la confederación valenciana de padres- poniendo de ejemplo «el mal resultado obtenido por Canarias en el último Informe Pisa, es una trampa», según Albert Sansano, coordinador del área de Renovación Educativa del STEPV. «No existe en Europa ni en todo el Estado español un solo estudio científico que sitúe la variable de jornada como determinante en el resultado académico», precisa.

«Más bien, lo contrario», apunta Miguel Ángel Vera, de la ejecutiva de CC OO. «Castilla y León, gobernada por el PP, lidera el ranking de rendimiento académico de las autonomías españolas que figuran en el Informe Pisa». «Sin embargo, Cataluña, que mantiene la jornada tradicional, obtiene peores resultados», añade Sansano.

Sin estudios «científicos comparativos concretos», sí existen al menos variados diagnósticos autonómicos. Por ejemplo, el estudio de la Inspección de Murcia de 2004 (también gobernada por el PP) donde se señala «una evaluación positiva de la jornada continua» y se confirma que «ni afecta negativamente al rendimiento escolar, ni causa mayor fatiga al alumno», subraya Cerdán. O, por ejemplo, los datos que se revelan del Informe Bofill (que analiza los resultados académicos por cursos y por comunidades) del que Cerdán extrae «cuatro ejemplos autonómicos que contradicen el argumento de que la jornada continua incrementa el fracaso».

Quizá acabamos de descubrir en Valencia que la jornada escolar continua o jornada «a la finlandesa» es perjudicial para los alumnos. No me corresponde a mi determinar si sí o si no. Deberá repetirse la investigación para ver si se pueden replicar los resultados, ya que la literatura científica internacional defiende lo contrario. Pero como profesor de conservatorio sí que puedo hablar en propiedad cuando señalo que una jornada educativo-laboral de pluriempleo que sufre nuestro alumnado no es la mejor de las opciones. No es exagerado indicar que el inicio de la primera clase del día y fin de la última del pueden, perfectamente, estar distanciadas por una franja de 12h. Pero aquí no radica toda la perversión del sistema, ya que, estos empleos de nuestro alumnado son empleos que solicitan de sus trabajadores grandes dosis de horas extras de trabajo fuera de las sesiones lectivas.

Pero bueno, si la amplia mayoría de padres no quiere la jornada escolar continua, tampoco deberán primar los criterios científicos. Hemos dichos mayoría de padres, ¿no?

Es el caso del colegio Virgen del Carmen de L’Eliana, cuya dirección organizó recientemente una consulta a las familias que se saldó en teoría con un sí mayoritario a la jornada continua. Ahora bien, ante la petición de amparo de un grupo de padres del centro contrarios al cambio de jornada, la Conselleria aclaró que «mientras no haya un reglamento, no pueden celebrarse consultas».

Es más, desde la Conselleria de Educación se insistió en que si se abriese en un futuro el proceso para autorizar la jornada continua, este centro de L’Eliana, por ejemplo, debería repetir la consulta, pues no se considera válida la última realizada. De hecho, lo que este grupo de padres de L’Eliana denunciaba era que «el llamado proceso ‘democrático y libre’ ha sido una pantomima para confirmar ‘lo que quiere la mayoría’, es decir, la jornada continua».

Pero que no se preocupe ese reducto de padres, que en el muy hipotético caso de que se implantara algún día la jornada escolar continua se haría de forma que se asegure la plaza de aparcaniño hasta las 17h en el colegio. En las primeras notas de prensa ya encontrábamos estas frases tranquilizadoras:

Además, una vez finalizadas las actividades lectivas y hasta la conclusión de la permanencia del alumnado en el centro, hasta las 17 horas, se realizará tanto el servicio complementario de comedor como el resto de actividades programadas por el centro.

Cabe destacar que las actividades extraescolares serán de oferta obligada para el centro y voluntarias para las familias, sin que puedan tener coste para éstas cuando se encuentren dentro del horario de permanencia del alumnado en el centro que establece la normativa vigente en materia de jornada escolar.

Es decir, adecuar el horario del niño al horario del adulto. Cuando quizá la reforma que deberíamos plantear sea la de racionalizar mejor los horarios laborales en España.

En fin, los músicos se forman en España pese al sistema educativo.

Un pensamiento en “Adiós a la conciliación de colegio y conservatorio

  1. Begoña

    En mi colegio en primaria y secundaria había jornada partida y en bachillerato jornada continua. He ido al conservatorio desde tercero de primaria y lo he podido compaginar bien. Sí que es verdad que a base de estudiar el colegio en descansos de clases del conservatorio, pero no me ha supuesto tan gran problema. Entiendo que se quiera facilitar el estudio del conservatorio y, de hecho lo comparto. He sufrido por ambos bandos que no tengan en cuenta el otro: en el colegio no tienen en cuenta que vas al conservatorio y viceversa. Te las apañas tú compaginando exámenes y audiciones. Y conforme creces tienes que escoger qué asignaturas de qué te dejas porque te coincide la audición / el concierto con el examen de la universidad. En mi conservatorio además, tienen en cuenta la participación que tengas en «actividades extras» (que tristemente, siendo «extras» acaban siendo obligatorias porque si no participas no apruebas…) En mi caso personal, me iba mejor en secundaria que en bachillerato el compaginar ambas actividades (sin tener en cuenta que la cosa se complica cuanto más avanzas de curso). En fin, dramas aparte, veo bien que se defienda la jornada continua, pero tampoco veo mal que se lleve a cabo la jornada partida.
    Un saludo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *